martes, febrero 15, 2011

El intercambio Cultural y sus secuaces.

Resulta sospechoso que en el mes de Abril, cuando en la Isla el régimen celebra por todos sus medios propagandísticos, lo que llaman La Jornada de Playa Girón, en la otra orilla un promotor de la cultura castrista esté anunciando un llamado Festival de la Música Cubana, con una amplia representación de agrupaciones de música popular actual cubana, y al mismo tiempo se incluyan los artistas domados que viven fuera de la Isla y hacen su trabajo ganando el dinero del enemigo con un muy bajo perfil crítico con la Dictadura, sorteando con increíble malabarismo el vaivén de estar en el filo de la navaja todo el tiempo, que es la mejor manera de vivir oportunistamente.

Sospechoso también que canales hispanos de Miami, no pierdan oportunidad de presentar a cuanto personaje de la farándula oficial toque el aeropuerto de la Ciudad del Sol, sin importar nada más, dándole una publicidad que para otros resultaría costosa, pero la pregunta es: ¿Es esta publicidad, una acción informativa o es en realidad un acuerdo tácito verbal de beneficios mutuos entre el Ministerio de Cultura de Cuba y estos canales en Miami?

De pronto un actor devenido en entrevistador realiza una serie documental por toda la isla sin recibir ningún tipo de represión, asedio, vigilancia o impedimento para ese tipo de trabajo cuasi conspirativo, donde se muestran aspectos de la realidad cubana, que otros reporteros han tratado de captar, con tremendas dificultades y bajo un asedio constante, sufriendo en ocasiones la confiscación o detención del material documentado, un paseo turístico que a veces apela a la nostalgia y otras tiene un marcado tinte costumbrista, como si las autoridades cubanas de pronto se hubieran replegado a sus cuarteles y devueltos a las provincias orientales a todos sus policías en la ciudad y sus alrededores.
¿Sospechoso, no cree?

Porque no cabe duda que es un intercambio de favores, en el cual ambas partes salen ganando: los comisarios de la cultura reciben publicidad gratuita en programas como: Arrebatados, Pellízcame que estoy Soñando, Esta Noche To Night y otros, mientras se les permite “filmar” las locaciones y gentes en lugares de interés para los inmigrantes de los últimos años, llegados de diferentes formas pero todos bajo el perfil de gustos conformados por la radio y la TV Cubana, que ya cuenta con filiales en Miami, donde inclusive pueden deleitarse con las películas que el ICAIC les hizo tragar y que a fuerza de la costumbre llegaron a ser la base del gusto y la añoranza con la que cuenta el promotor provocador, para recaudar dinero para sí y sus secuaces. ¿Las ganancias? Vaya UD, a saber, pero de lo que si estoy convencido es que no se va a gastar en beneficio de nuestra ciudad o guardar en ningún banco de Miami.

Las otras las ganancias propagandísticas ya están aseguradas, si el exilio responde con protestas o acciones violentas, eso reafirma la imagen que durantes años ha propagandizado la dictadura sobre Miami; si no reacciona y deja que el evento pase sin mostrar interés, entonces se proclama que el exilio histórico ha sido vencido y neutralizado y los inmigrantes económicos enviados en los últimos años son al fin, el mejor producto de exportación de la revolución, que envía de vuelta a las arcas de los Castros una gran parte del fruto de su trabajo, en nombre de la unidad familiar.

La respuesta a todo esto es simple: Hay que utilizar la vía del intercambio, como pieza de contaminación ideológica, utilizando todos los medios de la alta tecnología a nuestro favor, aprovechando la alta corrupción imperante dentro de todos los estamentos del régimen incluyendo sus artistas enviados, inundándoles con las alternativas de vida y sobre todo emplear la apertura de las visitas para bañar la isla de información y medios de obtenerla lejos del control estatal, robémosle la vieja consigna: Creemos , dos, tres, muchos Alan Gross, porque ya sabemos hoy que : Sin Información No Hay Libertad.
Nuestro modo de vida es la peor contaminación para La Dictadura, a eso no se resisten ni sus agentes ni sus militantes ni sus militares.

7 comentarios:

Danilo Delgado dijo...

Coincido completamente contigo. Tu conclusión hay que divulgarla. El fin de la tiranía es la transparencia, el flujo libre de información y la conspiración de todos los exiliados o cubanos residentes fuera de Cuba.

Elbalbado Conedacha dijo...

Que se vayan con su musica a otra parte.

Elbalbado Conedacha dijo...

Please support Dr. Biscet's nomination for his well deserved Nobel Peace Prize by writing to Thorbjørn Jagland, Chairman of the Nobel Peace Prize Committee in Norway. (postmaster@nobel.no)

erick d dijo...

hablando de intercambios culturales? porque el ex presidente Carter fue a Norcorea en 1994?

Ollantay dijo...

Me gusta tu analisis. Solo una pregunta: Cuando ocurrieron las guerras de independencia en Cuba,en el siglo XIX, habia television, radio, internet, telefonia,etc...? O lo que habia era otra cosa?
Saludos,

Alfredo Pong dijo...

Cada época tiene sus caracteristicas, en el siglo XIX no era considerado un acto terrorista atacar una ciudad o una barco o un campamento enemigo, no había sistema de contrainteligencia, ni ONU, ni OEA y el código del honor estaba establecido aún con el propio enemigo, la misma disposición y valentía que se necesitaba para combatir contra fusiles y cañones con machetes, es la misma de hoy al enfrentarse a un sistema cruel y totalitario, fascista de izquierda que utiliza todos los recursos sin miramientos ni código de honor contra sus enemigos indefensos, armados solo de ideas y mucho valor, pero nadie te impide que si asi lo entiendes, te lances de kamikasee por la causa que abrazas, solo que las consecuencias y la victoria, depende más del enemigo que de ti.
Yo capitán Araña nunca he sido.

Ollantay dijo...

Buenos argumentos, convincentes,pero se siente mucha impotencia y tristeza. Si algo ha sabido hacer QTS, es controlar todo lo que le permitio enrocarse y atornillarse al poder.
Saludos,